Estas tres imponentes espadas clavadas en la montaña constituyen el monumento llamado Sverd i Fljell (en noruego "espadas en la montaña"), y se encuentran en el fiordo Hafrsfjord, a las afueras de la ciudad de Stavanger, en Noruega.
El monumento fue creado por el escultor Fritz Røed e inaugurado en 1983 para rememorar la Batalla de Hafrsfjord, que tuvo lugar en en año 872, batalla que ha ocupado un lugar significativo en la cultura popular de Noruega, ya que tras aquella batalla el rey Harald I de Noruega, también conocido como Harald de la Hermosa Cabellera, consiguió unificar Noruega occidental por primera vez bajo el mando de un único monarca.
La espada más grande representa al victorioso Harald y las dos pequeñas representan a los reyes derrotados.
Pero aunque pueda parecer algo bélico, estas tres espadas de aproximadamente 10 metros no son si no un monumento conmemorativo de paz, unidad y libertad, ya que las espadas están clavadas en la sólida roca, de donde nunca se volverán a sacar.
Encontramos en el escaldo Þorbjörn Hornklofi, posterior a la derrota de los enemigos por parte de Harald I, este simple poema, a la vez de dramático e ilustrativo, acerca de la batalla.
Heyrði þú í Hafrsfirði, Escuchaste en Hafrsfjord
hvé hizug barðisk cuan duro ellos lucharon
konungr enn kynstóri el bien nacido rey
við Kjötva enn auðlagða; contra Kjotve el Rico.
knerrir kómu austan, naves vinieron del este
kapps of lystir, buscando la lucha,
með gínöndum höfðum con gargantas amenazantes
ok gröfnum tinglum. como dragón feroz.
